Devocional Día 14
ORACIÓN POR PAZ EN LAS ELECCIONES EN MÉXICO
Hoy concluimos estos 14 Días de Ayuno y Oración por México. Dios nos ha bendecido abundantemente. Sentimos su presencia en nuestras vidas. El ambiente en nuestra casa ha cambiado. La iglesia está siendo renovada por el Espíritu Santo. La obra que Él ha iniciado continuará.
La luz del Señor irá en aumento hasta que el día sea completo. En nuestro país se elegirán autoridades para nuestra nación, para los estados y ciudades.
Queremos que la voluntad de Dios se manifieste. Él es el que pone reyes y quita reyes (Daniel 2:21).
Pedimos a Dios que en esta jornada electoral no haya violencia, corrupción, amenazas ni fraudes.
Que el pueblo de México pueda expresar libremente su voto, y que este sea respetado. Que por causa de los comicios no se dividan las familias, los amigos, las iglesias. Que reine la paz y la armonía en nuestro país.
Oración de la Mañana
Salmo 95:6 “Venid, adoremos y postrémonos; Arrodillémonos delante del Señor nuestro Hacedor. Porque él es nuestro Dios; Nosotros el pueblo de su prado, y ovejas de su mano.”
Padre bendito, te alabamos por tu fidelidad y amor. Gracias porque llegamos al final de estos 14 Días de ayuno y oración fortalecidos en nuestros corazones, bendecidos abundantemente en nuestras vidas y familias.
Gracias por habernos despertado por tu Espíritu Santo a buscarte más, a despojarnos de todo peso y del pecado que nos asedia, y correr hacia ti. Gracias por escuchar nuestro clamor, y abrazarnos con tu presencia.
Hoy te pido por nuestro país, y las elecciones que se llevan a cabo en todo el territorio nacional.
Ayúdanos, Señor. Ayuda a nuestras autoridades. Reprende al violento y al destructor. Derrama paz y seguridad en todo este bello y bendito país. Que se haga tu voluntad y tu Reino se establezca en México. En el Nombre del Señor Jesús. Amén.
Oración de la Tarde
Salmo 96:9 “Adorad al Señor en la hermosura de la santidad; Temed delante de él, toda la tierra. Decid entre las naciones: Jehová reina.”
Gloria a ti, amado Padre. Gloria a ti, Jesús Salvador nuestro. Gloria a ti, divino Espíritu Consolador. Te amamos y reverenciamos.
Te ofrecemos nuestros corazones, nuestras vidas en adoración a ti. Sólo tú eres digno de recibir alabanza, honor, adoración.
Me postro delante de ti, y te reconozco Señor y dueño de mi vida.
Glorifícate, Señor, en nuestro país, en cada estado y ciudad. Manifiesta tu poder. Salva, libera, sana, bautiza. Que esta nación, que esta ciudad nunca vuelva a ser la misma, porque ha sido visitada por tu poder y presencia.
Te pido por las autoridades que han sido elegidas. Guárdalas. Conserva sus vidas, sus fuerzas y salud.
Cuida a sus familias. Que la transición en los gobiernos ocurra en paz y armonía. Que México sea bendecido, y sea agente de bendición para todos los pueblos de la tierra. Te lo pido en el nombre de Jesús. Amén.

